jueves, 24 de febrero de 2011

Entre barrotes y silencio



Mi propia vida es mi propia cárcel, rapunzel se quejaba de sus paredes, yo también, sé que son quejas de una niña que no sabe nada de la vida, pero me siento así, mi vida entera es una puñetera condena, siempre ahogada por los éxitos ajenos, siempre comparando, siempre sufriendo por ir dejando lastres durante mi vida entera, qué hago si es así como soy, intento cambiar, de veras que lo hago pero no es suficiente. Necesito aceptar que las personas que me quieren, quieren que sea la mejor, que sea buena en algo pero se olvidan que la avaricia rompe el saco, que se muere el amor de tanto usarlo, que las presiones pueden terminar corrompiendo a la persona, yo quiero lo mejor, quiero que el mundo entero se enorgullezca de mi, quiero tener reconocimiento pero no lo tengo, hago todo lo que puedo, pero todo son trabas, puedo hacer más por supuesto porque la perfección no existe pero a costa de qué. Sé que me precipité cuando comencé una relación tan prematura, sé que las cosas no se hacen así y si pudiera cambiarlo lo haría sin dudar un solo segundo.

Presa de mi propia vida, no es esto una ironía, cuando se supone que la vida de cada persona es libre e indomable? pues no es así como siento la vida, desde pequeños te educan para que estudies, para que consigas un futuro, para crear una familia y conseguir ser quiénes tus padres no fueron, según lo que ellos quieren, pero a veces, no me doy cuenta que lo que mis padres siempre han querido no es lo que yo quiero. Quiero tirarme por un puente, literal, quiero hacer escalada, rapel, quiero sentirme viva y una relación con un sexo frío, monótono y sin sentido no es la mejor solución. Preguntando y hablando se llega a roma pero cuando el caminante, el peregrino y los compañeros están hartos de preguntar y de que siempre sea lo mismo, qué hacen? pues se quedan aparcados en una cuneta de la carretera esperando a que alguien venga y les diga cuál es el camino correcto de una vez.

A veces alguien y no digo dios porque no suelo ser creyente nos pone retos, o algo, nos pone retos y de nosotros depende aprender de ellos o dejar que éstos sean nuestras tumbas. Entonces qué hacer, no hay una guía del mundo, no hay señales, ni caminos correctos, ni malas elecciones, hay elecciones que se toman fruto de años de pensamiento o de minutos de impulsividad, las decisiones marcan nuestra vida, lo que somos y a veces de una de ellas no te puedes deshacer, porque tus decisiones, mis decisiones las llevo en mi espalda todos los días cuando me levanto y todos los días cuando me acuesto, están siempre conmigo y no puedo hacer nada en absoluto por remediarlo...

Qué cojones me queda, pues nada, estas 4 paredes que mañana una vez más serán de nuevo mi tortura, estas cuatro paredes que muchas veces me han visto sonreír y otras cuantas llorar, que muchas veces me han visto decirle al mundo toma con todas las mayúsculas, con todo el orgullo pero que hoy simplemente cada vez que miro al techo se vuelven cárcel, con barrotes, con alambres de espinos, con descargas eléctricas, más y más pequeñas cada vez que más las miro. Es así y no puedo hacer nada para cambiar este pensamiento...

Porqué a mi? Nobody knows.

Qué tengo? Las ganas de algún día poder decir que soy una mujer realizada, porque ahora... solo tengo un libro, una botella de agua y un pc que a veces se apaga...

5 comentarios:

Mi mundo Irreal ಌ dijo...

Siento que lo escribí yo, te juro que me pasa exactamente lo mismo, me siento presa en mi propia vida y no estoy haciendo nada para cambiar eso :/ Un besito reina ♥

Anónimo dijo...

Yo creo que todos nos sentimos muchas veces asi...

Yo me he sentido atrapada muchas veces, me he sentido libres otras, demasiado! disfruté de todo lo que me gustaba, aparté obligaciones,... y llegó un momento que volví a sentir esa opresión!
Creo que el secreto es intentar mantener un equilibrio.

Cumple con tus obligaciones, pero no te pongas el listón demasiado alto, porque tienes razón, nadie es perfecto.

Pero sobre todo, haz todas las cosas locas que te apetezcan! siéntete libre, ahora que eres joven y puedes!

Haz deportes de riesgo, sal de marcha, cógete una borrachera, y enrróllate con un machazo!
todo eso mola mucho y libera mucho! siempre que te apetezca, claro ;)

Mil besitos!!!

galmar dijo...

Un abrazoooo muy grandeeeeeeeeeeeeeeeeee :)

AdP dijo...

No dejes que los demás te digan cuáles han de ser tus retos, plantéatelos tú misma. Es la única forma de dirigir o de mantener cierto control sobre tu vida. Muchas veces los demás nos indican cómo tenemos que ser o qué hemos de hacer sencillamente porque no tenemos opinión al respecto, o quizás porque no sabemos defenderla. Ya te digo, lo mejor es que seas tú quien marque cuáles son tus metas. No en plan utópico o quimérico, hay que ser realistas. Y pelear, pelear, pelear...

Saludos.

Marcos T: dijo...

Mi mundo es un poco diferente al tuyo, pero igualmente suelo sentirme encerrado por lo que me rodea, especialmente me siento atado por algunas responsabilidades, y también me presiona el hecho de que no soy lo que esperaba, esperaba cambiar al mundo, ser el hombre sobresaliente que descubriera el secreto de la vida, el creador de la inteligencia artificial, etc. la realidad es que no puedo resolver ni una integral, pero la vida solo nos pide seguir adelante tal cual somos.