viernes, 29 de octubre de 2010

Marchando la respuesta!



Una vez más desde el blog de Kelevra , sí, soy fanática de ese blog, me proponen una pregunta a la que encantada quiero responder con tranquilidad. 


¿Qué hago en la cama? Pero qué hago en la cama cuando se trata del refugio personal, cuando se trata de dormir, con la más intimidad de mi cuerpo, cuando se trata de refugiarme, de sentirme mía, personal, íntima. 


Me encanta andar en pijama por la casa, cuando llego de algún sitio lo primero que me planto es el pijama. Tengo varios pijamas pero me encantan para el invierno el típico pijama de franela de camisa y pantalón muy ancho y siempre de colores pasteles. El pijama de verano se resume en pantalón corto y camiseta escotada. Ya que se suele pasar calor y tampoco soy partidaria de dormir en bolas, antes de eso en ropa interior no me importaría. 


Por las noches antes de dormir con el portátil entre las piernas ojeo los blogs y suelo actualizar, me gusta leer en la oscuridad de mi cuarto, en la intimidad de mi cama, me encanta pensarlo todo dos veces, leer las entradas dos veces, es para intentar vislumbrar las entre líneas. Cuando llega una hora considerable en el que los ojos me pesan o el bostezo es realmente continuado apago el ordenador, cojo mi almohada blandita y me dispongo a dormir. También tengo un ritual sencillo pero a la vez cómodo. 
Estoy de acuerdo contigo en el sentido de irme a dormir siempre que tenga sueño, porque odio dar vueltas en la cama, lo suelo ver realmente incómodo y me da coraje porque me desvelo. Generalmente la gente que me conoce dice que cuando duermo soy una mezcla de una niña tierna y mujer sexy a la vez, a ver si un día me grabo y me veo. Suelo dormir de lado pero siempre tengo que pasar por dormir boca abajo, boca arriba, toda estirada, de un lado y del otro, pasando la mano por debajo de la almohada para ponerla mullida. 
Hay gente que le gusta dormir sobre una almohada de piedra y otros les gusta más blanda que otra cosa. 
Hay gustos para todo. Yo soy del tipo de las almohadas blandas, aunque las duras tampoco me disgustan.
En verano duermo destapada completamente y en invierno me tapo hasta los hombros. No soy de mantas, prefiero edredones y cuantas más mantas peor para mi porque no sé como lo hago que siempre termino en la madrugada levantándome a rehacer la cama. Siempre con colores pasteles y motivos florales o tiernos. 


Cierto que como mi cama no hay ninguna que es un lugar privado, que es personal e íntimo. Realmente de acuerdo y cuando duermo en otras casas no duermo tanto y sin embargo en mi cama duermo mucho y me encanta quedarme por las mañanas de los sábados y domingos en la cama durante media hora, en la tierna calentura del cuerpo y la cama. 


A veces babeo cuando duermo. Me gusta dormir mirando al lado izquierdo y no sé porqué pero siempre me despierto en esa postura,  la mayoría de las veces. En invierno duermo con una mano debajo de la cara y la otra entre las piernas. En verano duermo siempre boca abajo toda estirada y me encanta moverme de lado y dejar el brazo colgando por el colchón. A veces me gusta mucho rozar con un dedo el suelo pero suele ser incómodo. 


No me incomoda dormir con alguien siempre que no ronque mucho, porque si ronca me gusta quedarme dormida antes para así no enterarme. Tengo un sueño pesado pero a veces me despierto de sustos o sobresaltos y me encanta dormir. Mis amigas que son nerviosas y de sueño ligero me envidian en ese aspecto ya que en menos de una hora estoy durmiendo plácidamente. 


Ahora os hago la misma pregunta, qué es para vosotros esa hora mágica, cómo dormís?






Me marcho de puente festivo. Espero que lo paséis bien, en mi caso estaré todo el puente estudiando y sin salir, toca visita a la familia. Volveré con ganas de leeros y con segundas partes de algunas historias que se quedaron en el aire. 

jueves, 28 de octubre de 2010

Noche sin final.

Y siempre la misma piedra que se termina convirtiendo en pastel y siempre la misma consecuencia, la misma imagen, la misma situación y como no. La misma persona.


Cenizas que se reavivan, amores que se fueron y volvieron, esperanzas que se alimentan, miedos que se crean. Es solo cuestión de tiempo que la misma piedra se convierta en el motivo del suicidio como persona pero también es cuestión de tiempo que la piedra se termine volviendo  un pastel, un tropezón al que nos acostumbramos y dejamos pasar, al que nos da igual caer de nuevo.


No poder es no querer ergo, querer es poder.
Las 12 de la madrugada y una llama fortuita me lleva hasta tu cama. Me llevó esta vez a tomar una determinación, eso y que me di cuenta que simplemente la ansiedad de la separación era la que no nos dejaba tomar la decisión.


Una cama vacía, un amargo recuerdo y una decisión que por fin esclarece mi mundo. Dejar algo que amas por el simple hecho de la felicidad de los demás, dejar algo que te daba vida por algo que te la quita, pero es así porque sabes que no tiene futuro.


La última noche que nos llevó a la locura a deshacerme en tus brazos, a querer morirme después de probar tus labios, a querer que dure eternamente el segundo que tardaste es pasar tu mano por mi espalda como si te fuera la vida en ello, a querer irme de allí corriendo por miedo a que realmente fuera éste el final. Ya estaba bien de volver como el turrón, ya estaba bien de hacernos daño, de llorar por culpa del otro, de sentirnos solos, miseros, desgraciados, abandonados por no tener lo más importante. Ya estaba bien de reproches, de discusiones y de echarnos de menos a la madrugada, de no ser capaces de permanecer callados contemplando la magia del silencio, ya estaba bien de mentiras, de elipses desesperadas, de noches en vela.


Tus caricias, tus abrazos, tus fuertes besos, tus suaves besos, tu cálido y acelerado corazón, tu fría y fuerte espalda. La locura. Las paredes se echaban encima de mi cuerpo atenazándome hasta dejarme sin sentido. La locura de no querer irme pero saber que al final del día uno de los dos se iría.


Sí, es el final, sí ese fue el final de una historia llena de mentiras y daño, de una historia que solo tenía, que solo tuvo cama. Movimientos al compás, movimientos imposibles como si estuviéramos sincronizados, costaba creer que para una cosa fuéramos uno y para otras cosas jamás hicimos el intento de serlo.
Pero era cierto, maravilloso, aunque solo se quedaba ahí, en esa cama que se llevaba todas nuestras energías, que se llevaba nuestra vida.


Demasiado tarde. Demasiado tarde es muchas veces, demasiado tarde es la mayoría de las veces y bueno en este caso no vale más tarde que nunca. 


Así es como por orgullo muchas historias de amor terminan, muchas historias de química, de pasión, de sexo, de locura, de amistad, de familia. El orgullo de las personas se hace invencible cuando recibe golpes y se hace sabio y poderoso cuando gana pero se hunde, se muere y se va de vacaciones cuando pierde.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Días de luto.


Cuando pierdes a un amigo, pierdes una parte de ti. Pierdes risas, gestos, anécdotas, pierdes tardes de charlas, noches de borracheras, bailes y risas. Cuando se pierde a un amigo creo que no tiene punto de comparación a cuando se pierde a una pareja. Ambos procesos son dolorosos, llevan luto y siempre es duradero. Duele y más duele cuando no es la distancia, cuando no es porque se haya echado pareja, duele más cuanto más tiempo de amistad era. Duele y mucho. Son días de no saber a quién pertenecer, de tener la sensación de no conocer, de ser tonta con las personas, de no tener intuición. Esto duele y es como cuando debes sacar una espada que se clavó de una vez, duele más al sacarla de una manera lenta. Se sufre y no se quiere admitir porque cuesta tener que borrar su número de tu móvil, de la agenda del número de tu casa.

Cuesta hacerse a la idea de que se reduce un grupo que ya era reducido, pero que no hay marcha atrás. 
Ella tuvo muchas oportunidades de cambiar, tuvo muchas oportunidades de ir con la verdad por delante y no quiso, tuvo oportunidades de enmendar su error y realmente no lo hizo. Prefirió hacerse a la idea de que la culpa la teníamos nosotras, de que la marginábamos sin razón. Ella vive en su mundo de mentiras y de ahí no quiere salir pero nosotros, los demás, nos hartamos de las mentiras, nos hartamos de dar oportunidades hasta la saciedad, de estar con ella cuando está mal. De decirle lo que tiene que hacer, no lo que quiere escuchar y nunca escuché un gracias, ni un abrazo, ni un qué tal. Supongo que así es la gente cuando no para de mentir, cuando solo existe en su vida ella y sus circunstancias. 

Pues bueno, sabemos que todo se muere con el tiempo, pero claro lo que pasa es que al final, al dejarlo ir, al saber que no se volverá a producir más una reunión con ella pues duele. Perdemos a dos, no a una amiga a dos. 

Qué aprendo con esto? Que todo tiene un fin tarde o temprano, que las personas valen más por la verdad aunque ésta se presente en forma de nubarrón y duela más que alegre. Aprendí que te das cuenta de los verdaderos amigos con el tiempo que se pueden contar con los dedos de una mano, que realmente saben cómo calmarte, cómo ponerte nerviosa, cómo hacerte reír y cómo hacerte llorar. 

Esta etapa, este punto y final es como el final de crónica de una muerte anunciada. Es la muerte, el despedido, el paso de la página, la aceptación de que la persona se debe ir. Porque muy a nuestro pesar, muy a mi pesar ojalá nunca hubiera llegado a ésta situación. No es parte de nosotros, no es parte de algo que construimos juntas, porque ella se empeña en destruirlo cada vez que nos ve fuertes. Ella nos ha hecho mucho daño, una amiga que le das la oportunidad siempre y eterna de cambiar pero que al final cansa, que al final te sientes incómoda estando en la misma habitación que ella. 

Una pérdida que a veces se intenta sufragar con una ganancia pero no. Una pérdida anunciada, es como la bolsa de zapatos viejos o ropa vieja que tenías que dar a la beneficencia pero siempre se te olvida, como el deshacerte de una prenda vieja que era querida para ti, es duro pero sabes que debías hacerlo. 

Creo que con esto he madurado un poco más, me da pena porque siempre será igual de mentirosa, siempre estará sola porque no es capaz de mantener una amistad sincera y siempre hará daño porque como me dijo cierta persona "no puedes querer a nadie sin antes quererte un poco a ti mismo" 
Qué no esperar más de ella. Parece que ella sabía lo que le esperaba, que se ha ido retirando, bajando la bandera lentamente y con discreción para que no nos diéramos cuenta pero siempre nos damos cuenta porque cuando sus luces se apagan nuestras visiones nocturnas comienzan a funcionar. 
No la llamamos más, no la vemos más y ella sabe el porqué. No vendrá a pedir explicaciones, no llamará para quedar porque sabe lo que pasará. No dará las gracias y tampoco dirá adiós. Su orgullo le pesará por encima de todo eso mucho más pero claro está que si quiere pensar eso a nosotros ya nos da igual. 

Le deseamos suerte en la vida pero ella es de ese tipo de personas que jamás sabrá lo que es amar de verdad. Jamás disfrutará de una relación con plena confianza, seguridad, apoyo y amor. En realidad siento condescendencia por ella pero ya nuestra paciencia la agotó hace mucho. 
Nosotros como grupo hemos perdido a mucha gente por estar con una sola, hemos dejado de conocer a gente que merecía la pena porque esas personas no aguantaban a la que era nuestra mejor amiga y ahora nos dimos cuenta que perdimos a gente importante, a gente que nos podía haber aportado muchas cosas. 

Ella siempre malmetía y creo que con este paso que hemos dado ya nos hemos liberado y es doloroso porque perdemos a 2 amigas pero se sabía. Ahora quedan los días de luto para luego no mirar atrás. 
No se trata de hacer como si estuviera muerta, no estamos cómoda con ella y entonces eso es lo que duele que realmente no es por culpa de que se vaya a otro sitio a vivir, o que su pareja la absorba. Es que como amiga nos ha fallado a todos, nos ha mentido, nos ha manipulado, se ha reído en nuestra cara, desde el verano hasta ayer mismo y ya está bien. Que como un dicho "no hay que hacer leña del árbol caído".

Sólo sé y he aprendido que estos malos tragos, estos malos ratos y este luto nos ha unido al resto. Al resto nos ha hecho confiar y saber quién era la oveja negra. Aunque suene mal, me da igual porque ahora estamos más unidos que nunca y lo digo a grito pelado y con la boca enorme. Que tengo 4 amigos maravillosos desde hace 10 años y que estoy muy contenta de que ellos me hayan aportado muchísimas cosas buenas. Que he perdido a alguien, sí, que ese alguien me dio cosas buenas, sí, pero cuando la balanza al final se desequilibró demasiado lo mejor era dejarla caer. 

Al romperse pierden la esencia.

La buena y verdadera amistad, no debe ser sospechosa en nada. Miguel de Cervantes. 
Aristóteles "La amistad es un alma que habita en dos cuerpos, un corazón que habita en dos almas" 

lunes, 25 de octubre de 2010

Hablar sin saber.


No me gusta dar una opinión si no he tenido experiencias en el campo del que se habla o si sé de alguien muy cercano que las haya tenido.

X:-"Yo nunca pondría los cuernos, yo nunca me enamoraría de alguien que tiene pareja, yo nunca sería el segundo plato de nadie"-

Ahora bien, tienes dos opciones, o callas y te aguantas tu opinión, o hablas, eres sincera y lo mismo su imagen de ti cambia. 

Sinceridad ante todo. Y allí estaba yo discutiendo con una persona que jamás pensé que discutiría. 

El destino nos pone pruebas, el destino nos da opciones, no nos ponen una pistola en el pecho y como siempre digo, el sexo es de dos, el tango es de dos, las peleas son de dos y uno no hace todas estas cosas sólo porque no se puede. 

He oído muchas excusas, "iba borracha", "estaba en un mal momento", "me engatusó". No. No aguanto eso, muy bien que haya pasado todo eso pero al final quién decidimos somos nosotros. Actuemos en consecuencia, no nos quejemos y admitamos los errores así como los castigos. 

Pues bien allí me encontraba enzarzada en una acalorada y apasionada discusión. Sé de las cosas que hablo y me gusta habla con propiedad, me gusta escuchar todos los puntos de opinión, rebatirlos y me encanta sembrar dudas, sea en el tema que sea. 

Siempre digo que nosotros podemos estar en muchas circunstancias de nuestras vidas, podemos encontrarnos con muchos factores externos que nos provocan situaciones y hacer actos que lo mismo nos arrepentimos pero que por algún motivo hemos llegado a dónde hemos estado, sea como fuere y en las circunstancias que fueron. Lo que quiero decir con esto son varias cosas, una, que me da coraje la gente que habla sin saber o sin haber conocido a alguien cercano y dos que me da aún más coraje la gente que juzga, hace juicios y condena a las personas cuando puede que realizaran actos en consecuencias desfavorables. Con esto último no quiero que se conviertan motivos en agravantes o atenuantes de ciertos actos, simple y llano. 



Somos nosotros y nuestras circunstancias.
Actuamos con respecto a ellas siempre y cuándo éstas nos dejen. 

sábado, 23 de octubre de 2010

Premio!



Lau en su blog me ha otorgado un premio del que hablo con la boca grande y muy orgullosa. Me encanta el blog de Lau y si ella no me lo hubiera dado, se lo daría seguramente.

Las normas del premio es decir quién te lo otorgó y otorgarlo a un máximo de 4 blogs.

Mis premiados son
El rincón de su por su infinita sabiduría sobre el cuerpo de la mujer y la mente o comportamiento de los hombres, con todo el cariño

Sies por sus preciosas historias, enrevesadas, divertidas y por ser tan cercana. Que ahora está dejando de escribir y no me gusta un pelo, pero sus razones tendrá.
http://tomepasaami.blogspot.com/

Blind por tener un blog muy entretenido y porque me encantan sus pensamientos.
http://sinterminomedio.blogspot.com/

Y el último por supuesto va para el rincón al que acudo todas las noches, el rincón que me hace meditar demasiado, el rincón que tengo que leer las entradas por 3 veces para mirar las entrelineas, las palabras usadas, etc. Kelevra 
http://entrelunasyalquitran.blogspot.com/

Espero que os guste y bueno con la mejor de mis intenciones.

La estación y el viajero.

En una estación se dan lugar muchas personas, personas que llegan, que se van, que esperan a alguien que viene, que despiden a alguien que se va.

Ir  a una estación de metro no siempre debe suponer pasarlo mal. No siempre nos debemos guiar por aquello que es insustancial, por aquello que no perdura en el tiempo y en algún momento diremos adiós.

El adiós significa el cierre de algo y el comienzo de otro algo. Pensamos en la ida, pensamos que se va, vamos a despedir a alguien en la estación que emprende un camino para bien o para mal y cuando lo hemos despedido al momento pensamos en el regreso, en encontrarnos en ese mismo lugar, otro día distinto, en otra fecha distinta y puede que en otra hora distinta.
La persona que se va piensa que es duro pero que algo nuevo comienza, tiene miedo ante la novedad, ante no saber desenvolverse, tiene miedo del qué pasará, del mañana, de la incertidumbre, del no saber qué hacer. Pero esos miedos se vuelven a medida que está sentado en su asiento más pequeños.
Los barullos de la gente al pasar, los tropezones, pisotones, empujones, palabras mal sonantes que recibes cuando la estación está repleta de gente que viene y va. Gente triste o alegre por irse y gente triste o alegre por venir.

Una estación es también un punto de encuentro para muchas personas, un punto de encuentro de amantes, de parejas, de viejos amigos, de mejores amigos, de familiares, de tu pasado y de tu futuro. Una estación que ha tenido mucho afluente de gente es una estación con historia, con vida en sus paredes.

Las reacciones que en mi cuerpo se producen cuando observo en las horas punta como la gente sale del tren con maletas, bolsos, maletines, mochilas y un sin fin de enseres como se puede denotar por la cara o el aspecto de cada uno si es agradable o no, si va o si viene. Es mucho tiempo aprendiendo a observar, es mucho tiempo observándolo todo de una forma más peculiar, más incisiva.

Las estaciones de metro me producen nostalgia, me producen ternura y a la vez tristeza, las estaciones de metro esconden historias antiguas, que nos sorprenderían a muchos. Antes que los coches y antes que los aviones, las estaciones de metro son míticas y encierran muchos sentimientos, muchas reacciones, muchas sensaciones porque al fin y al cabo son sentimientos, puede que no recordemos la estructura a la perfección de una estación porque siempre se nos olvidará algo ya que fuimos con unas emociones que distaban de la realidad que abstraían de la realidad y no te podías fijar en muchas cosas.
Han pasado desapercibidas en el tiempo, han pasado por alto, han sufrido muchos terremotos, caídas de puentes, lluvias, truenos y aún así siempre llegando a su destino, siempre saliendo a la hora.

"Pasajeros suban al tren con destino desconocido"


Y así se reúnen historias, y así se crean lazos y así nos damos cuenta de lo que tenemos y perdemos o recuperamos y tuvimos.

viernes, 22 de octubre de 2010

Volar.

La belleza de la locura, la belleza del lado salvaje de alguien. la belleza del saber lo que hacer, cómo y cuándo. 

Simplemente alocada, divertida, sentimental, fiel, leal y bastante apasionada. Le encanta la vida, le encantan las noches de fiesta, las noches de películas y palomitas, las noches de sexo, las noches de charlas sin pausas. Le encanta disfrutar de la vida que ahora se le presenta tosca pero es vida. Debe enfrentarse al futuro con el semblante de una mujer madura, responsable, que siempre toma las decisiones acertadas pero otras veces no quiere. Otras veces quiere quedarse en la cama envuelta en una manta a solas con sus pensamientos y fantasías de niña pequeña. Quiere volver al país de nunca jamás para quedarse por un tiempo. Tomar decisiones, tener responsabilidades y el deber de no defraudar a los que más quiere es algo duro y si por un momento pudiera dejarlo todo ella lo haría, lo haría para tomarse un día libre, sin seguir siendo ella, sin seguir siendo la que todos esperan. Aunque se lo pase bien, aunque le encante salir y todas esas cosas necesita presionar el botón de la pausa y alejarse de su nombre y de sus historias por un tiempo. 

Quedarse en un parque jugar con barro o arena, sentirse niña sin responsabilidades, caprichosa y consentida. Quiere hacerlo pero tiene contradicciones porque todos los días le gusta la vida que lleva aunque eso no tiene que ver para dejar de ser ella por unas simples horas. Volar a otro país, sentirse otra persona, si alguien le pregunta su nombre mentir, si alguien le pide su número que no conoce de nada dárselo, quiere ser irresponsable, más alocada todavía, más sentimental todavía. Quiere hacer puenting, quiere patinar sobre hielo, caerse y reírse mucho de si misma, que sus amigos la graben y luego ser el centro de las risas vecinas. 

Quiere simplemente dejar de ser esa chica que estudia o trabaja, esa chica que tiene que. Que tiene que hacer muchas cosas. Que las tiene que hacer, que son obligaciones a veces, y otras las disfruta pero las tiene que hacer. Tiene que sentirse libre, llegar a casa y no tener que encender el pc para ponerse al día, quiere no tener que llamar a sus amigos o pareja, quiere no tener que comer la comida, quiere hacer nada. 

Esa chica aburrida de la vida, esa chica decepcionada de la vida, esa chica que sabe lo que es la vida y que escribió su final hace mucho tiempo. Esa chica de semblante serio y hasta triste diría yo. Esa chica quiere dejar todo a un lado y ser niña de 7 años para creer que volar se puede hacer algún día o creer que los dibujos de planet 51 son basados en hechos reales. 

Creer en la inocencia, volver a la inocencia, a la irresponsabilidad, al esparcimiento, a la desocupación.

¿Te vas con ella? ¿Se puede hacer eso, alejarse de la vida por unas horas?

jueves, 21 de octubre de 2010

Una flor que se marchita...

Cuando tú me amaste, me diste la vida, me diste alegrías, risas, chistes, palabras bonitas, palabras hermosas, me diste algo en que creer, me diste autoestima, seguridad, confianza, ternura, pasión, devoción. Me lo diste todo, me diste todo lo que pudiste en tan poco tiempo, me diste la vida, me sentí viva de una manera especial y no me cansaré de proclamarle al mundo que fui feliz.
Te has ido por una causa superior a ti y ahora sólo me quedan los recuerdos. Esperaré a que vuelvas pero no te prometo que esté de una pieza. Sentirse viva para que luego te quiten la vida es como nacer probar las mieles de la vida y morir. Nadie quiere pero eso no lo elegimos, simplemente nos toca. Pude fijarme en otro, pude enamorarme de hombres buenos, hombres maravillosos que dejarían toda una vida por mi pero no lo hice porque ninguno me daba lo que tú me dabas, riesgo, misterio, incertidumbre, pasión a niveles elevados no apto para cardíacos.

Éramos fuego y ahora solo queda el agua. Éramos lo que jamás fuimos con otras personas. Después de muchas experiencias una no deja de creer pero sus expectativas disminuyen y por tanto, no hay muchas cosas que le sorprendan pero ahora, te has ido.

He sido todo gracias a ti y te has ido, no te culpo pero solo me queda el vacío que nadie ni nada pueden llenar, sólo me queda el esperar y esa llama seguirá viva cueste lo que cueste. Soy tan frágil como una rosa que se marchita, una rosa rosa y débil, una rosa de la que solo quedan pétalos en su alrededor.

Elementos que se conjugaban a la perfección, elementos que se conseguían a la perfección y elementos que ya no son nada porque cuando uno deja la cadena los demás no funcionan y no hay una parte de mi cuerpo que me recuerde a ti, no hay una parte de mi cuerpo que no tenga tus marcas, no hay una parte de mi cuerpo...

Me quedan recuerdos, me queda hacer una vida desde 0, me queda imaginar el momento del reencuentro...

miércoles, 20 de octubre de 2010

Intento de resolución.



A raíz de una disyuntiva neuronal de mi querido amigo Kelevra en su blog me plantea otra disyuntiva aún más sacada de contexto y algo relacionada. Le intento dar respuesta pero a lo mejor está inconclusa o es diferente de la opinión del resto.

- Indecisión de la palmera: Pongamos que el sueño de toda la vida de un caballerete muy acaballerado fuera comprarse un ático con sus vistas, sus ventanales y su terraza a la que salir en pelotas y rascarse los *censured*… lo típico. Y pongamos que el tipo ahorra, ahorra y consigue reunir el dinero. Pero pongamos que también lleva toda su vida intentando ligarse a la peluquera, y resulta que justo el día después de juntar el dinero, la señorita peluquera le dice al caballerete que tiene vértigo, que no la gustan las alturas y que ella lo que quiere es vivir en un chalet. ¿Qué debería hacer nuestro caballerete con sus ahorros? (aviso: en este juego no vale nada de especular, que si se compra una cosa es para siempre)

En este escrito hay una disyuntiva que da muchos temas y tiene muchas ramas por las cuales me puedo ir porqué siempre deben ceder los hombres? ¿hay alguna ley no escrita que determine quién debe ceder y cuando?

Antes de nada, debo decir que mi pensamiento no es acertado del todo y no sé si es de la opinión general. 

Creo que depende de la situación, depende del momento y más importante depende de la persona. Creo por otro lado, que a veces ceden más los hombres que las mujeres y creo que no es justo. Somos poderosas, tenemos armas infalibles y cuando queremos algo, nos lo proponemos generalmente lo conseguimos y a algunas nos da igual usa el arma más poderosa que es la del sexo. Somos las mejores chantajeadoras porque sabemos usar las armas emocionales, las debilidades y los reproches lo mejor que podemos y bueno qué importa si es por nuestro bien. Salimos ganando y contentas. 

Lo cierto es que una mujer si le da una patada a una piedra tiene muchos tíos esperando estar con ellas, no pretendo ofender en ningún momento. Lo que es más cierto es que las mujeres al saber eso somos soberbias y algunas ponemos el listón demasiado alto.

Una mujer ama de 0 a 100 en meses y un hombre es al revés, ama de 100 a 0 en meses. Con esto digo que tampoco somos nosotras la malas, ni ellos los peores. 
Cuando se plantean situaciones del tipo de ir a sitios que uno no quiere las mujeres somos muy sabedoras de nuestras posibilidades y de nuestras habilidades, decimos venga vamos a tal y luego te hago esa comida o eso que tanto te gusta. El hombre pasa por ahí. Cuando el hombre queda con amigos y la mujer le dice a esta hora en casa que tenemos que ir a tal sitio, la mujer sabe de sus habilidades y si éste no se presenta o llega tarde ya la tiene liada pero cuando ella se entretiene charlando con amigas si llega tarde tiene excusa y es comprensible. 

Con esto digo que hay muchas cosas injustas, hay muchas cosas que dependen de la persona y la pareja, hay personas que tienden a ceder más porque les da igual y personas más cabezonas que no quieren ceder porque creen que así sus principios quedan manchados o traicionados. 

En la disyuntiva que expone mi querido blog seguido debo decir que por amor se hace de todo y siempre hay uno en la pareja que ama más y cede más por lo tanto, que no digo que esté relacionado el amar y el ceder.
En este caso el hombre ha ahorrado y es el sueño de su vida de él depende que esté por encima o no su amor por el ático. También creo y digo que el vértigo es curable si se acude a un psicólogo así que en este caso me decanto claramente por el lado masculino. Debe ceder el hombre porque es el sueño de su vida y se ha hecho realidad. 

A veces nos aprovechamos de las debilidades de los hombres, lo sabemos usar muy bien y a veces hacemos daño sin querer. Hay una famosa canción que ahora viene a cuento, en la canción se dice que las mujeres cuando nos empeñamos tratamos muy mal a los hombres en contadas ocasiones y luego nos sorprendemos al dejar a esos hombres de ver como triunfan con muchas mujeres más aunque somos nosotras las creadoras de los chicos que luego van de flor en flor y rompiendo todos los corazones que ven. Me da coraje pero es verdad, el hombre ama sin darse cuenta, ama hasta el máximo aunque decrece con el tiempo pero ama muchísimo y luego sufre mucho más que una mujer aunque no lo demuestre. No expresa sentimientos pero como dicen por ahí el hombre que calla mucho es porque siente aún más. 

En conclusión al batiburrillo de ideas y pensamientos, las mujeres debemos aprender a ceder de vez en cuando y el hombre debe aprender a no dejarse pisotear tanto pero sí un poco que eso nos gusta. Por tanto, que se compre el ático y que la mujer se pague un psicólogo para arreglarse los vértigos. 

martes, 19 de octubre de 2010

Detalles

Los preciosos detalles del ayer, los preciosos detalles que están por venir. Los detalles que me conquistaron, los detalles que amargaron mi existencia.

No hay nada más cierto que "Pienso, luego existo". Pero me atrevo a decir que algo tan cierto como eso son los detalles. Detalles que mueven el mundo, detalles por los cuales se han terminado o comenzado guerras, detalles que nos han unido y nos han separado más.

-"Esa lágrima me dijo más de lo que esperaba, esa lágrima eran tus sentimientos a flor de piel. No entendía porqué llorabas, si simplemente lo que hice fue comprar un marca páginas y regalártelo"- 


Tú pensabas que era un simple marca páginas, como has dicho, pero para mi era mucho más de todo lo que podía esperar de ti. Sé que nunca te pido nada, sé que nunca espero nada de ti porque a través de mi experiencia no puedo esperar nada de nadie. He aprendido a servirme sola, a sentirme sola, a estar sola, a valerme sola y ahora entras tú en mi vida, la pones patas arriba y me regalas algo que no te pudo costar mucho pero es un detalle que me ha iluminado la vida, que me ha hecho darme cuenta que te amo, que quiero estar contigo el resto de mis días y que hoy es el primero del resto de nuestra vida juntos. Adivinaste que los coleccionaba y no sé porqué me regalaste un marca páginas pero gracias.

La magia del amor está en los pequeños detalles.
La magia de la vida está en los pequeños detalles. Cuando miramos al cielo, vemos nubes y creamos imágenes con ellas. Cuando damos un paseo y vemos algo que nos llama la atención, por ejemplo un adolescente ayudando a una anciana a cruzar la calle, ésta le quiere dar 1€ al adolescente y éste no lo acepta porque dice que le enseñaron a ser así. Un coche que se para en un paso de peatones, que frena cuando el semáforo está en ámbar, una niña que compra chuches y le da a una amiga de las suyas porque a ella se le habían caído a la arena. Un niño que ayuda a otro a levantarse del suelo.

La lista de pequeños detalles es inmensa, a veces, no nos damos cuenta pero con observar detenidamente por unos segundos vemos que hay muchos motivos para creer que ésta sociedad todavía no está tan corrupta como dicen.

Lo más bello del amor, lo más hermoso de la amistad, lo más considerado de los compañeros siempre son los pequeños detalles que conforman un gran mundo.

Un algo complicado que se divide en millones de cosas sencillas.

lunes, 18 de octubre de 2010

Adiós esperado



Y eso fue todo lo que quería saber de ti. Allí me encontraba con unas voces que de fondo se escuchaba, con las ganas de tocarte el cuerpo, de sentir tu calor, tu piel, tus latidos. 


Nos encontramos en la madrugada dónde tus anhelos se hicieron mágicos, dónde tus caricias cobraron vida, dónde el tiempo pasaba raudo delante de nuestras caras sin dejarnos lugar a pararlo. Burlándose de nosotros se hallaba aquel conejo con su reloj. 


Confundí texturas en aquel cuarto azul oscuro casi negro, confundía tus caricias con los simples roces de las sábanas, sábanas que tenían historia, sábanas que se pusieron de acuerdo para llevarme a la locura. 


No más. Ese fue el beso del adiós, la despedida, la pasión de la pérdida, el temor de que el tiempo se haga eterno. No quería pasar allí un segundo más, no quería mirarte, ni tocarte pero todos mis prejuicios se desvanecían al sentirte. 


Un adiós que no un hasta luego, que no un hasta pronto, no. Un adiós, el final de una era, el final de nuestra historia de 2. Un final que nada más lejos de la realidad no fue amargo, simplemente fue algo que debíamos haber hecho hace mucho tiempo y no hicimos por miedo, por los recuerdos o por todo lo que habíamos compartido el uno con el otro. 


Miedo quizás o simplemente aceptación de que algo había terminado hace mucho tiempo, que no nos atrevíamos a dar el paso por el miedo a la soledad?


Lo hicimos, la despedida no fue amarga, sabíamos que había llegado el final y simplemente decidimos aprovechar los últimos momentos de aquella noche mágica buscando en nuestros recovecos para descubrir algo que estaba escondido. Disfrutamos del otro cuerpo al máximo, disfrutamos del otro sentimiento sabiendo que el día siguiente vendría lo que venía.


El adiós, los últimos besos y las últimas caricias. El miedo a la soledad ya es un añadido, ya no podíamos temer más nada después de todo lo que habíamos pasado. Era algo que no podía pasar, era un miedo inexistente, un paso que dimos, tarde pero lo dimos. 

viernes, 15 de octubre de 2010

Silencios cómodos.

Prohibición, tentación, ardor, pasión, relajación, deseo y calor. 

Lo prohibido se vuelve tentador, el morbo de aquella situación nos dejó perplejos, nos sumió en un sueño profundo de satisfacción. La sensación del deseo, el sentimiento del querer llegar a la subida de la montaña para ver las visas, el sentimiento que junto con las ganas se vuelve aterrador, se vuele locura, desenfreno y deseo cada vez más intenso. 

El deseo que nos deja a un lado todos los prejuicios. El cometer el mismo error por todas las veces que se ha cometido, el tener el presentimiento que algo no va bien pero que te encanta. 

El deseo de hacer las cosas por la vía difícil, el deseo 
de tener personas que te aman hoy mañana y siempre. Esa situación, ese hecho nos llevó a volvernos locos, nos llevó a querer desearnos y amarnos todas las veces que fueran posibles pero no surgió como debía ser. No ocurrió lo que esperábamos. 

Estamos destinados a ser amantes. Estuvimos juntos y no funcionó, perdimos el norte, nos llevamos mal, peleamos, discutimos y simplemente tenemos paz en la cama. Por eso estamos destinados a ser amantes a tener solamente sexo porque una relación de pareja jamás funciona entre nosotros. 

Es dejarte, es emprender una vida en pareja y verme absorbida por tu deseo, estar deseando tenerte en mi cama cada segundo más que el anterior. Es ni contigo pero tampoco sin ti. Es querer estar a tu lado pero no poder, es la pasión del odio, la motivación de la dificultad, la motivación de lo prohibido y las ganas de amar a una persona que va en "crecendo".  

Las ganas de besarte, de desnudarte y hacerte mio, las ganas que cada vez que te veo o hablo contigo evolucionan. Sé que está mal pero lo necesito, lo amo, siempre vuelvo a caer en sus redes pero no podemos vivir juntos, no podemos estar juntos porque nos matamos. El deseo desaparece en cuanto abre la boca, hacemos daño a otras personas y nos hacemos daño pero es una droga, una adicción, una enfermedad porque ahí estamos sin poder aguantar una vez más el deseo, sin poder soportar un silencio incómodo una vez más. Ahí estaba tirándome a tus brazos, a tus besos, a tus caricias, sin poder resistirme y sin poder negarme a ti. 

No son tentaciones, no son cuernos, no es un amante. No sé lo que es pero si de algo estoy segura es que no me arrepiento y que me encantaría repetir siempre que pueda. 

jueves, 14 de octubre de 2010

Men





Hombres! 


Me inspiro y no puedo dejar de escribir. Si tuviera aquí mismo y ahora mismo a mi pareja del guantazo que le daba lo dejaba temblando. Todos los hombres son iguales. Todos y no se salvan ni los gays. Son unos niños chicos siempre, tengan la edad que tengan. Juegan a la play, wii, etc. durante horas y horas mientras tu te sientas a verlos hacer el tonto. Cuando les entra la prisa por salir de casa como tardes más de 5 minutos ya están chillando a lo lejos: "venga, vamos". A lo que yo siempre contesto: " como no te calles tardo 50 minutos más o ponte a jugar a la play un rato y luego cuando una está lista le dices venga termina y la contestación es espera a que guarde". 


No hablemos de que no tienen iniciativas para llevarte a salir. Vamos a dar un paseo y siempre terminas en el mismo sitio, vamos a ver una película y siempre ves las del mismo género. La lista es enorme. 
No hablemos de sus maneras de ligar, de sus maneras de decir las cosas, etc. 


No tengo por costumbre obligar a un hombre a ir de tiendas y cierto día lo vi raro pero mi pareja se ofreció voluntario. MUJERES DEL MUNDO jamás vayáis de compras con un hombre. Es insoportable, te persigue por toda la tienda como un perro faldero y les da igual si lo que les enseñas te tapa nada más que un cuarto de tus partes que ellos contestan siempre lo mismo;" está bien". Cuando te lo pruebas da igual que parezcas un salchichón embutido en tripas que te dirán, "que bien te queda, venga llévatelo y nos vamos.


Bueno y no se puede mencionar jamás la cifra de otros hombres que te hayan hecho disfrutar en la cama o dónde fuera porque para ellos hundes su ego y les da igual que haya sido hace años o meses, si te lo ahorras y dices 2 o como muchísimo 3 les subes la moral algo. Sé de lo que hablo. Luego siempre están comparando, si le hablas alguna vez de algún ex a la mínima que te quejes te sueltan:" pues vete con tu ex" y a veces nos quedamos pensando pues sí que debería hacerlo. 


Luego está eso de las mentiras compulsivas. A nosotras nos da igual, nos la trae al pairo que os vayáis de fiesta, os alcoholicéis u os droguéis siempre y cuando no nos mintáis. Que nos da igual que bebieras 20 copas pero no mientas. Además que al día siguiente les preguntas tan buenamente ¿bebiste? y te dan un no rotundo por respuesta pero a los dos días hablando con uno de sus amigos dice no veas la pea que cogimos el otro día no? Eso si que es surrealista. 


Bueno y esta es la parte que más gracia me hace. Cuando un hombre idolatra a su coche por encima tuya. Mi caso fue el siguiente: mi pareja con su coche más rayado y con la pintura a cachos, que tu le dices se le cae la pintura al coche y te mira con cara de pocos amigos y te suelta otro monosílabo. A lo que iba, tiene su coche más rayado que los cristales de unas gafas de baratillo y si le das un golpecito o lo rayas un poco te suelta la bronca del siglo y anda con toda la mala cara todo el día. 
Cuando esto me sucedió le dije que ni se notaba porque estaba casi todo el coche igual. Aumentó el cabreo.  


Cuando ellos se enfadan y les preguntas qué les pasa siempre es NADA. En fin que desistes, te vas a otra cosa y ya ponen caras de cordero degollado, pasas de mi, etc. 
Los celos que siempre tienen, infundados y a veces paranoicos hasta con amigos gays. Por el amor de Dios que es gay, que me mira las tetas para ver si el sujetador me va a conjunto con la camiseta y ellos empeñados en que me miran raro. 


Y esto no es todo, simplemente un avance de todas las demás cosas que contaré y me dan coraje de los hombres. Generalizo porque se puede generalizar. Vosotros también generalizáis de las mujeres y no opinamos. Además es mi blog y publico lo que quiero. 


Hoy siento que los hombres fueron creados simplemente para perpetuar la especie pero no podemos vivir sin ellos. Mañana lo mismo cambio de opinión sobre todo lo anterior o no. 

miércoles, 13 de octubre de 2010

Frozen


Una tentación que ponía fin a todo el calor que estaba pasando en esos momentos. Una tentación que está prohibida. Una tentación que a día de hoy solo me evoca placer. 

Se reunieron la sensación del frío cuando te calan las muelas, la sensación de calor cuando te comes un brownie, esa mezcla del frío y el calor que no para hasta que no denota en un espasmo con escalofrío reconfortante. 

Es peligroso me dijeron, no tan rápido me dijeron. Disfruta me dijeron y sin saber cómo ni porqué me encontré devorando ese placer tan súbito y tan especial. 
Es como el frío de una mañana de invierno después de salir de la calentita cama. 

Sensaciones que abundan, que son comunes pero especiales por su vulgaridad, sensaciones que te corroen todo el cuerpo, te atrapan en un laberinto enorme y sin salida, sensaciones que nos dejan atrás todos los malos pensamientos que una vez puede que tuviéramos. Sensaciones que se pusieron de acuerdo para demostrar que era verdad, que la felicidad del pequeño placer es más grande que si te toca una lotería y no estoy loca. Cuando el placer es pequeño se disfruta más y es tan cierto y tan real como la vida misma. 

Todos me dicen que estoy loca, que no es verdad, que no puedo comparar y yo les digo que mientras son ignorantes de la vida, soy sabedora del pequeño placer. 
Soy sabedora de la textura, del color, del contorno y de la sensación que produce. 

Me incitaba a muchas cosas, me decía una y otra vez que soy una persona en un lugar privilegiado por disfrutar tanto con tan poco y es así. Me alegro que a veces lo reconozcan porque es cierto que soy conocedora de pequeños y maravillosos placeres. Personas normales como yo no son capaces de darse cuenta de los pequeños milagros de la naturaleza. 

Sacar la forma positiva de disfrutar de aquel pequeño placer es reconfortante y te sientes como un niño pequeño.
Tierno, frío, dulce, blando, empalagoso, suave y caliente después. Da un placer enorme comerlo. 

No penséis mal porque hablo de la sensación que uno tiene cuando se come un helado de chocolate en una tarde de 35º de Julio o Agosto. Y todos los sentimientos que se pueden llegar a producir con objetos parecidos o cosas parecidas que evocan placeres eternos. Mientras dura esa sensación es realmente maravilloso y cuando termina te quedas con un buen gusto en el cuerpo. 

Engaño

Esa rosa que estaba cargada de mentiras, esa rosa que me has regalado para que me de cuenta de cuánto me quieres. 

-¿Vienes conmigo?-
-No. Tengo que trabajar-

Me fui con las mismas de paseo esa tarde y los vi en un coche hablando tan gustosamente. Puede que hiciera conjeturas demasiado pronto, puede que me precipitara pero a día de hoy no soy tonta de más. 

Esa fue la rosa del adiós, esa fue la rosa que se marchitó en mi corazón cuando terminó aquello tan hermoso que teníamos. Simplemente tenerte entre mis brazos me hizo feliz pero ya desperté. 

Se cayeron las vendas de mi corazón. 
Se cayeron las vendas de mis ojos,
me di cuenta que no eras para mi. 
Mi madre me decía que la persona que me amara me haría daño pero no hasta ese punto. 
Me dijeron que andase con cuidado y me tiré a los brazos en cuanto el semáforo se puso en ámbar, aprovechaste que era débil para decir todo lo que esperaba y necesitaba 
Me olvidé de todo lo demás porque ya nada importaba. Vi cuál es tu calidad de ser humano, de persona y ya has malgastado todos los cartuchos de tu escopeta. 
Ya es tarde, desperté de mi letargo y aquí te encuentro. Delante de mi recogiendo los pedazos que ya no me puedes dar. 

Más vale tarde que nunca y ahora nunca mejor dicho. 
Odio sentirme así pero cuando una abre los ojos por primera vez lo que quiere hacer es mirar todo lo que tiene alrededor y disfrutarlo.

No me culpes por querer olvidarme de todo, no me culpes por querer sentirme querida de verdad por otras personas. Me di cuenta de ti y ahora estoy feliz. Olvidarme de todo por un tiempo me hará superarlo mejor, olvidarme de que exististe me hará reconfortar mi alma por un tiempo, ya hablaremos del después pero hoy no hay nada más que hacer. 
He sufrido pero eso me hace más fuerte.

* La primera vez que me engañes la culpa será tuya, la segunda, será mía. - Proverbio chino 

Las mujeres podemos ser muy tontas y llegarnos a cegar mucho por personas que a veces no merecen la pena. Somos humanas y erramos, aprendemos y volvemos a cometer los mismos errores pero eso es lo que nos hace ser mejores personas, mujeres, amantes, esposas, madres, abuelas. etc. No hay nada que me guste más cuando una mujer, cuando una vez me di cuenta que había perdido tiempo con un hombre, cuando abrí los ojos y vi que por la ceguera que tenía me había perdido mucho tiempo de mi vida. 

De todo se aprende. 

martes, 12 de octubre de 2010

¿Si me ponen los cuernos...



Me gustaría saberlo o no?




Os propuse una encuesta hace unas semanas, no recuerdo cuántas. Os pregunté, en el supuesto que os pusieran los cuernos si os gustaría saberlo y realmente esta encuesta ha tenido una alta participación, no sé si por el hecho de dar un consejo o porque todos estáis de acuerdo. También dicen que del dicho al hecho hay un estrecho.

Han participado 27 personas en esta encuesta y me ha encantado que hayáis participado tantos. 21 de vosotros abogáis por saber si os pusieron los cuernos y tan solo 6 de vosotros por lo contrario, por el mejor no saberlo.

Ahí va mi opinión. Me gustaría saber si ha sido una infidelidad con sentimientos, si esa infidelidad puede hacer daño a mi pareja y a mi relación pues sí me gustaría saberlo porque entonces la persona se dará cuenta de lo que es tenerme cuando me pierda o me haya perdido. Una persona que comete adulterio, cuernos, escarceo amoroso por llamarlo de alguna manera es una persona que miente bien.

Cuando nos enteramos de que nos han puesto los cuernos hay dos casos y dos maneras de actuar. Podemos pensar que todo este tiempo ha sido una mentira, que nunca nos han querido más allá del principio, que jamás nos dijeron cosas reales, que jugaron con nosotros y aún más nuestra confianza y nuestra dignidad se ve minada por una persona que en teoría nos ha amado. Evidentemente ya no nos creemos nada de lo que ha pasado, nos pensamos que nos la han jugado de una manera vil y cruel. La otra forma de actuar es ponerse a la defensiva y pensar que nosotros somos los culpables, que hicimos las cosas mal, que no somos buenos en la cama, que no nos quieren por nuestro físico o por el simple hecho de que se ha convertido todo en monotonía y realmente nos escandalizamos de manera enorme sin más motivo ni excusa.

Yo actúo de la primera manera porque soy una mujer muy visceral, actúo y luego me arrepiento pero hago las cosas como son.
Si me pone los cuernos mi pareja, marido, amante, etc. me volvería loca, no podría aguantarlo porque sé lo que es y es más sé lo que es pillar a alguien con las manos en el pan como aquel que dice. Me puse histérica y me baso en mi experiencia para decir que no me gustaría saberlo. Si es una infidelidad donde hay sentimientos, donde las personas se encuentran con premeditación, se mensajean y mantienen digamos una relación más estable pues entonces si me gustaría saberlo por cualquier persona. Lo mismo mi ceguera no me dejaría verlo desde terceras personas pero luego con el tiempo sé que lo agradecería.

Si se trata de un escarceo amoroso esporádico y que ha pasado una o dos veces prefiero no saberlo. Desde siempre me dijeron que debía mirar por los demás, que debía ponerme en lugar de las otras personas y sé que las personas no somos de piedra, nos hacemos daño, sin querer y queriendo, nos portamos bien y mal a veces, herimos solo con palabras pero lo hacemos y de sobra sé que hay millones de circunstancias, millones de motivos y excusas para terminar en una cama con otra persona.

Sé que hay que pensar en los demás y porqué el que pone los cuernos no piensa en el otro. Pues digamos que es algo que no se puede pensar, digamos que es algo (sigo hablando en el caso del esporádico y una o dos veces) que no se puede calcular ni premeditar. Al contrario por supuesto si se trata de una persona que lo ha premeditado y lo lleva haciendo muchas veces.

Poner los cuernos como ya he dicho en otras ocasiones a veces une parejas aún más y otras desune. Una persona que ha perdido algo y se da cuenta luego lo trata con más cuidado. Creo en las segundas oportunidades pero en el caso de los errores azarosos, porque los errores premeditados, soy ingenua puede ser pero no tonta.

Creo que mi opinión ha quedado clara, creo que las personas nos hayamos en situaciones a veces un tanto surrealistas y cuando dicen que se trata de fuerza de voluntad, es todo mentira. Nunca se trató de eso. Si quieres lo haces y si no te quedas sin hacerlo. Unos cubatas de más y una sensación de soledad te llevan a ese estado... Un viejo amigo, atracción y deseo es una mala mezcla.

Somos humanos y cometemos errores pero tampoco debemos jugar con las personas porque no se lo merecen. Las infidelidades es un tema distinto al de los amantes porque el amante es la relación de infidelidad ya duradera con premeditación y termina desgastando.
Nos pueden hacer daño con facilidad, nos pueden querer con facilidad, nos pueden odiar con facilidad. Simplemente amamos, sentimos, padecemos, pensamos y somos seres sociales para por lo menos una vez en la vida pasar por esas situaciones.

Me ha sorprendido gratamente que la mayoría de los que habéis votado tenéis vuestras ideas, os gustaría saberlo y lo considero una virtud. Yo, sin embargo, odio las confrontaciones y no me puedo imaginar el día que mi pareja me diga que tiene un amante o que alguna tercera persona me lo diga porque creo que sería demoledor para mi. Ese tipo de malas noticias como yo las considero son realmente destructoras para la dignidad y la confianza. 



¿Qué pensáis vosotros? ¿Porqué os gustaría saberlo? ¿Cómo es para vosotros una infidelidad?