martes, 8 de febrero de 2011

Lágrimas






A veces me niego a llorar pero no puedo, cuando intento contener las lágrimas es como que salen disparadas como si de una bala se tratara. 
Lágrimas de pena, de alegría, de rabia, de emoción, al fin y al cabo son lágrimas. Derramar lágrimas no es algo de lo que uno debe avergonzarse, derramar lágrimas las derraman desde los más grandes hasta los más insensibles. Hoy he derramado lágrimas de alegría y de emoción. El examen más complicado de toda la carrera, esa asignatura que el primer día te dicen bueno cuántos han repetido la asignatura y hay una chica que levanta la mano diciendo que solo le queda esa para sacarse la carrera, te deja asustado, alucinado y bastante deprimido. Pues sí, he aprobado esa asignatura, no con una nota raspada, ni tampoco con una notaza pero la he aprobado y me siento orgullosa de mi misma, porque me lo he currado mucho. Y lloré porque no daba crédito. 

Esta noche también he llorado porque la emoción al ver cierta película ha sido tal que me he quedado alucinando. Es realmente impresionante como la idea de una vida, de una persona o de alguien que no puede ser lo que quiere, se puede ver tan reflejada en la realidad. Cuentos de hadas, princesas, historias irreales pero que al final tienen todas su parte de verdad. La emoción ha sido tal que realmente me he parado a pensar en ello, no quería llorar, quería pensar que era irreal que esos casos en la realidad no se dan, quería pensar que una vez más directores y actores se ponen de acuerdo para crear una auténtica obra de arte. 
Impactante, te sientas durante hora y media, ves una película y algunas películas pueden trastocar todo tu mundo. 

Por otro lado, y desde un punto más triste hoy he llorado por dentro por mi mejor amiga, no le va bien en los estudios y la quiero con locura, entonces me pone triste que siempre se venga abajo y sea demasiado negativa tanto que incluso a veces da miedo. He estado con ella, le he dicho que se desahogara y ha llorado conmigo, no me he sentido bien pero ella me necesitaba y bueno no podía hacer otra cosa. 

En fin un día movido que ha dado mucho para pensar y otro tanto para escribir. 
Me quedo con esto. 

Las lágrimas que una vez llamaron a mi puerta hoy están en mis mejillas saltando al vacío sin red de seguridad. 

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola cuanto tiempo sin pasarme, gracias por la visita.. maravilloso tu escrito.. :)

Irene P. dijo...

Llevaba tiempo sin pasar, tengo esto abandonado!
Una vez que escribí que las lagrimas son historias, por eso, no evites llorar, las historias tambien tienen derecho a manifestarse!
Un beso, genial entrada!

Pilar Abalorios dijo...

Me gusta pensar que las lágrimas de algún modo son esa parte no mediatizada por el pensamiento, la razón, el miedo o la conveniencia, son reflejo de sentimientos libres y auténticos, y salvo el mal rollo de que se te corra el rimmel, bienvenidos sean los sentimientos.

Felicidades por ese exámen, no hay como que te digan que no puedes para que te superes.