miércoles, 13 de octubre de 2010

Engaño

Esa rosa que estaba cargada de mentiras, esa rosa que me has regalado para que me de cuenta de cuánto me quieres. 

-¿Vienes conmigo?-
-No. Tengo que trabajar-

Me fui con las mismas de paseo esa tarde y los vi en un coche hablando tan gustosamente. Puede que hiciera conjeturas demasiado pronto, puede que me precipitara pero a día de hoy no soy tonta de más. 

Esa fue la rosa del adiós, esa fue la rosa que se marchitó en mi corazón cuando terminó aquello tan hermoso que teníamos. Simplemente tenerte entre mis brazos me hizo feliz pero ya desperté. 

Se cayeron las vendas de mi corazón. 
Se cayeron las vendas de mis ojos,
me di cuenta que no eras para mi. 
Mi madre me decía que la persona que me amara me haría daño pero no hasta ese punto. 
Me dijeron que andase con cuidado y me tiré a los brazos en cuanto el semáforo se puso en ámbar, aprovechaste que era débil para decir todo lo que esperaba y necesitaba 
Me olvidé de todo lo demás porque ya nada importaba. Vi cuál es tu calidad de ser humano, de persona y ya has malgastado todos los cartuchos de tu escopeta. 
Ya es tarde, desperté de mi letargo y aquí te encuentro. Delante de mi recogiendo los pedazos que ya no me puedes dar. 

Más vale tarde que nunca y ahora nunca mejor dicho. 
Odio sentirme así pero cuando una abre los ojos por primera vez lo que quiere hacer es mirar todo lo que tiene alrededor y disfrutarlo.

No me culpes por querer olvidarme de todo, no me culpes por querer sentirme querida de verdad por otras personas. Me di cuenta de ti y ahora estoy feliz. Olvidarme de todo por un tiempo me hará superarlo mejor, olvidarme de que exististe me hará reconfortar mi alma por un tiempo, ya hablaremos del después pero hoy no hay nada más que hacer. 
He sufrido pero eso me hace más fuerte.

* La primera vez que me engañes la culpa será tuya, la segunda, será mía. - Proverbio chino 

Las mujeres podemos ser muy tontas y llegarnos a cegar mucho por personas que a veces no merecen la pena. Somos humanas y erramos, aprendemos y volvemos a cometer los mismos errores pero eso es lo que nos hace ser mejores personas, mujeres, amantes, esposas, madres, abuelas. etc. No hay nada que me guste más cuando una mujer, cuando una vez me di cuenta que había perdido tiempo con un hombre, cuando abrí los ojos y vi que por la ceguera que tenía me había perdido mucho tiempo de mi vida. 

De todo se aprende. 

2 comentarios:

Edmundo Dantés dijo...

Buenas noches.

Entrada esta que no incita a sonreir; siempre me confunden tus entradas sobre estos temas...

Si se me permite anotar algo, generalmente las escribes en tercera persona, con algunos cambios a primera, en la de hoy solo encuentro primeras personas... no se que significa eso, la psicologa eres tu.

Pd: Agradecería que te pusieses en contacto conmigo:
Pandemonium_huma@hotmail.com
(Pasaré juees y viernes en tu tierra visitando a una amiga y soy adicto al café y la cerveza tanto como a charlar)

teologiadeS dijo...

Me gusta confundir. Me gusta sembrar dudas y que la gente piense y comente. Por supuesto que cada persona puede preguntar directamente pero digamos que todas las entradas tienen parte de mis historias con adornos o sin ellos...

Un saludo y me pondré en contacto, no lo dudes.