Carta a mi pareja

Te quiero. Te quiero mucho y te amo más de lo que nadie se puede llegar a imaginar.

En nuestra relación de 3 años y 3 meses nunca hubo un pero, tuvimos rachas, altibajos, momentos agrios y dulces, peleas y reconciliaciones pero nunca lo hemos dejado definitvamente, siempre encontrábamos la forma de volvernos a enganchar el uno al otro.

Eres un hombre maravilloso, me has dado siempre lo que te he pedido, me has apoyado y regañado cuando lo necesitaba, me has hecho darme cuenta de muchas cosas y me has hecho pensar en otras tantas. Me sentía bien contigo, me sentía unida a ti, realmente unida. Cada vez que teníamos una pelea aprendía algo más de ti.

Siempre te increpé que no hablabas que no me dejabas meterme en tu corazón, siempre te increpé que no me dijeras las cosas, tus sentimientos y tus pensamientos, siempre te increpé que fueras duro conmigo.

No sé como estoy, no sé si quiero estar contigo. Te quiero y eso no debes ponerlo en duda jamás, te quiero y te amo muchísimo porque son muchas las cosas que vivimos juntas pero me cansé de tus excusas, me cansé de tus mentiras, de que esperes siempre de mi cosas que no puedo darte, me cansé de que no me entiendas, me cansé de que me amenaces cuando algo de mi no te gusta y todo eso ha ido haciendo que mi amor, mi pasión, mi compromiso contigo se reduzca más a cada segundo.

Nuestro amor es una llama que se apaga y me da miedo hablar contigo de esto por la reacción que puedas tener, me da miedo decirte todo esto porque no quiero que me grites, ni que llores, ni que te calles, quiero que juntos intentemos recuperar nuestra historia pero tengo un miedo enorme a que me dejes porque sé que eres lo mejor que me ha pasado en la vida.

No quiero decirte todo esto, tampoco quiero decirte que me atraen otros hombres por miedo a ti, por miedo a que me repudies o me abandones, no quiero tampoco escuchar malas palabras de ti hacia mi porque te sientas herido y dolido, no quiero que me digas cosas y luego te arrepientas, no quiero perderte, no quiero... me resigno a aceptar todo eso... porque me sentiré el triple de culpable de lo que me siento ahora por sentir que lo nuestro no tiene futuro, que le veo un final triste, que le veo un final en el que no faltarán las lágrimas.

Lo que espero de ti... es que luches por mi, hasta que no tengas más aliento que me reconquistes si puedes hacerlo, que me llenes de ilusión porque la perdí hace unos meses, que me ayudes a encontrarme es lo único que te pido...

El día que me haga valiente para decirte todo esto será el día más incierto de toda mi vida, no sé como reaccionarás, tengo cierta idea pero me da pavor... Ese día las quinielas se pagarán al mejor postor y no sé si tendré que llamar a alguien para que recoja mis pedazos o simplemente celebraré la comprensión por parte de mi amado...

Una carta es una manera sencilla de decir aquello que no cuesta tanto expresar, pero lo mismo no la mandamos o lo mismo no llegamos a meterla en el sobre. Podemos intentar romperla porque una carta es la expresión de nuestra conciencia en papel, es la expresión de nuestros pensamientos en papel, estamos callados siemplemente oyendo y escribiendo lo que nuestra vocecilla nos dice, reflejando en el papel algo que nos cuesta sacar a la luz por mucho y diversos motivos... Eso es una carta... Algo que perdura en el tiempo, es como la manifestación del pensamiento que pasa a ser una realidad escrita y reflejada en papel.

Me gustaría poder decirte esto pero por miedo solamente me dedico a escribir y escribir sin parar, porque temo que no lo entiendas, no temo tu reacción, no temo la causa ni la consecuencia... Temo que no me entiendas, porque en el momento que me de cuenta que no me comprendes se rompen todos mis sueños de futuro contigo, todas mis ganas de ser tu pareja, todo mi conocimiento sobre ti, se rompe toda mi magia...

Y qué es un mundo sin magia... un mundo con la ausencia de algo...