martes, 27 de julio de 2010

La pluma

Si todo fuera tan fácil como poder superar esta distancia, si todas las distancias se limitaran a esto o si todas las personas hiciéramos el mismo daño que hace esta fuerte y madura pluma a las personas que amamos todo sería más fácil.

Pasearía la pluma por tu dedo, por tu espalda, barriga y pecho para poder así hacer que a tu cuerpo le diera un escalofrío.

El escalofrío pasaría a dejarte una sensación de algo suave y tierno. Somos fans de las cosas suaves y tiernas porque las personas somos así. Frágiles, tiernas, suaves, nos sentimos a veces como esa pluma.

Eso nos sirve para ver que aunque parezcamos sin corazón es una pura fachada.

Cuando la pluma rozó mis labios, éstos se quedaron anestesiados, sintieron toda la calidez que algo tan pequeño me proporcionó, así como se compaginó con la pluma para dedicarme la mejor de las sensaciones.

5 comentarios:

Pilar dijo...

Es a veces el inexistente peso de una pluma el que nos recuerda la carga que portamos.

I need a miracle dijo...

A veces las mas pequeñas cosas en apariencia insignificantes, tienen la capacidad de provocar en nosotros reacciones o efectos enormes y preciosos.

Rubia de la cuarta fila dijo...

ojalá los problemas que cargamos a nuestras espaldas pesaran igual que esa pluma. Aunque muchas veces buscamos en las cosas simples su complejidad, por lo tanto hasta la pluma nos pesaría.
Muá

África dijo...

Siento no haberme pasado por la entrada anterior, la verdad esque me gustó bastante.
Me parece genial que te posiciones hacia el bando que creas mas justo.

Saludoss

Claudia. dijo...

Podría ocurrir que todo fuese como una pluma...